Una tarea difícil: mantener el Burj Khalifa
Todos los rascacielos requieren un inmenso esfuerzo de ingeniería para llevar a cabo su construcción. Pero no olvidemos que la vida en un rascacielos no termina cuando se terminan las obras...
Quizás pasa desapercibida la gran cantidad de trabajo que se necesita para mantener un edificio como este. Una vez terminado, el edificio no es diferente a un organismo vivo, ya que requiere de constante cuidado y mantenimiento para continuar funcionando eficazmente. Además, el edificio más alto del mundo tiene complicaciones especiales...
4 meses, 36 sistemas de rappel y 18 cubos a medida
Esto es lo que se necesita, por ejemplo, para limpiar la fachada del edificio más alto del mundo. Y la limpieza de las ventanas es solo un ejemplo del inmenso desafío que supone mantener el Burj Khalifa funcional e inmaculado.
Con más de 800 apartamentos y más de 37 pisos de oficinas, un equipo dedicado tiene que supervisar y controlar instalaciones como ascensores, sistemas de aire acondicionado y la subestación eléctrica más alta del mundo en un edificio que consume más de 160 000 kWh al día. Además, la dirección tiene la no tan agradable tarea de eliminar los deshechos del edificio, haciendo uso de un sistema de tolvas de residuos con 1 300 m de largo, por las que baja la basura a unos 194 km/h y compactando antes de enviarla a los vertederos.
Las instalaciones del Burj Khalifa
En su planificación inicial, el Burj Khalifa estaba destinado a ser completamente residencial. Sin embargo, ahora alberga muchas otras instalaciones que incluyen:
- El hotel Armani de 304 habitaciones en 15 pisos;
- El restaurante At.Mosphere y sus vistas;
- Toda una gran variedad de oficinas y suites corporativas.
57 ascensores y 8 escaleras mecánicas que ayudan a los residentes y visitantes a moverse dentro del edificio, con una velocidad de hasta 10 m/s y una capacidad máxima de 12 a 14 personas. En el exterior se encuentra la fuente Dubái, la fuente coreografiada más grande del mundo. Todas estas instalaciones proporcionan una gran variedad de desafíos para los profesionales encargados de mantener el Burj Khalifa en funcionamiento.
¿Qué se espera de los profesionales de mantenimiento e instalaciones del Burj Khalifa?
Además de los retos tecnológicos que conllevan un edificio como el Burj Khalifa, sus profesionales de mantenimiento también deben garantizar niveles de calidad extremadamente altos de acuerdo con su imagen de lujo. Evidentemente, el rascacielos es el hogar de muchas personas y da la bienvenida a los huéspedes de hoteles y restaurantes que esperan un servicio de alta calidad.
El equipo dirigido por Bashar Kassab, el director senior de la Administración de instalaciones, trabaja las 24 horas del día para proporcionar un servicio constante a los visitantes y residentes permanentes del Burj Khalifa. Desde un escritorio central, el equipo de Kassab coordina la gestión del edificio, vigilando cosas como el sistema de aire acondicionado, la fontanería y el uso de energía.
Esta es una tarea enorme con una amplia gama de actividades de mantenimiento que deben ser coordinadas. Por ejemplo, si solo echamos un vistazo a un aspecto como la limpieza, podemos ver que:
- Se necesitan 300 trabajadores para limpiar el interior del edificio;
- Es necesario que desciendan 36 trabajadores en rappel para poder limpiar el exterior;
- Cada año, se limpia un área del tamaño de Gran Bretaña.
El equipo de Kassab tiene que gestionar y coordinar a todos estos trabajadores desde una estación de trabajo centralizada. No solo está en juego la limpieza del edificio, sino que también deben controlarse y gestionarse aspectos como el balanceo del edificio provocado por el viento.
Enseñanzas del mantenimiento y gestión del Burj Khalifa
El tamaño y la escala de un proyecto como el Burj Khalifa proporciona información valiosa para cualquier persona interesada en el mantenimiento de edificios, especialmente de rascacielos.
¿Qué podemos aprender del Burj Khalifa?
Hay tres conclusiones principales que deben tenerse en cuenta sobre el mantenimiento y la gestión de activos del Burj Khalifa:
- El mantenimiento de rascacielos requiere de coordinación: el equipo de Burj Khalifa tiene una gran tarea entre manos, y es por eso que han elegido tener un enfoque más global, es decir, supervisar todo lo relacionado con el mantenimiento del edificio desde un escritorio central. Esto les permite realizar un seguimiento de todo a la vez, ya sean cuestiones de limpieza, fontanería, etc., para mantener todo funcionando sin problemas.
- La tecnología y el software son tus amigos: la coordinación requiere de tecnología inteligente. Por eso, equipos como el de Burj Khalifa utilizan un sistema innovador como el software de gestión de mantenimiento. Este software utiliza IA y aprendizaje automático para ayudar a los profesionales de las instalaciones a hacer bien su trabajo. Desde la perspectiva de mantenimiento, la tecnología y la innovación son la clave para el éxito de edificios como el Burj Khalifa.
- Ve aún más lejos (y tu servicio todavía más): el Burj Khalifa es un brillante ejemplo de cómo es posible ofrecer un servicio de lujo incluso en el cielo. Los profesionales del mantenimiento pueden mirar el Burj Khalifa y estar seguros de que los edificios impresionantes (y tecnológicamente exigentes) pueden ofrecer un servicio de lujo.
Después de echar un vistazo detrás del escenario del edificio más alto del mundo, es evidente que mantenerlo diariamente es una tarea difícil. ¡Aprende de las enseñanzas del equipo del Burj Khalifa y mejora el mantenimiento y la gestión de activos de tu empresa hoy mismo!