Los Equipos de Protección Personal (EPP) son dispositivos diseñados para proteger al usuario frente a riesgos que pueden amenazar su seguridad o salud en el trabajo. En el contexto del mantenimiento industrial, los EPP son esenciales para salvaguardar a los trabajadores de los peligros inherentes a las actividades de reparación, inspección, y mantenimiento en general de las máquinas o activos.
Estos peligros pueden incluir, entre otros, la exposición a piezas móviles, agentes químicos, electricidad, temperaturas extremas, y ruido.
Importancia de los equipos de protección personal (EPP)
El mantenimiento industrial es una actividad que presenta un alto riesgo de accidentes. Trabajos en alturas, uso de equipos de corte y perforación, espacios confinados, riesgo de descarga eléctrica, son sólo algunos de los ejemplos de posibles escenarios de accidentes que los equipos de mantenimiento enfrentan durante sus actividades en el piso de fábrica.
Es importante señalar que las empresas son las que deben proporcionar los equipos EPP a sus empleados y a continuación detallamos la relevancia de que sean proporcionados.
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Preservación de la salud y la vida: La razón más obvia y crucial para la utilización de EPP es proteger a los trabajadores de lesiones y peligros potencialmente mortales. La vida y la salud son irremplazables, y en situaciones de riesgo, los EPP actúan como la última línea de defensa.
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Cumplimiento legal: En la mayoría de los países, el uso de EPP es no solo una recomendación, sino un requisito legal. Las empresas pueden enfrentar sanciones significativas si no proporcionan o no garantizan el uso adecuado de EPP.
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Reducción de costos: Aunque pueda parecer que la adquisición de EPP representa un gasto, a largo plazo, estas medidas previenen accidentes que pueden resultar en costosas indemnizaciones, bajas médicas y pérdidas de productividad.
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Fomento de la cultura de seguridad: La implementación y exigencia de EPP refuerza una cultura de seguridad en el lugar de trabajo. Esto, a su vez, puede aumentar la moral de los empleados al ver que la empresa se preocupa por su bienestar.
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Prevención de paros laborales: Un accidente grave puede resultar en la detención de operaciones, lo cual puede tener un impacto significativo en la producción y rentabilidad de una empresa.
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Responsabilidad social: Las empresas que priorizan la seguridad de sus trabajadores también están demostrando responsabilidad social, lo que puede mejorar su imagen pública y relaciones con la comunidad.
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Mejora de la productividad: Trabajadores seguros y saludables tienden a ser más productivos y eficientes en sus tareas.
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Reducción de la severidad de los accidentes: En el caso de que ocurra un accidente, el uso de EPP puede reducir la gravedad del mismo, evitando lesiones más graves o fatales.
Tipos comunes de EPP en la industria
Los EPP son una barrera entre el usuario y los peligros, reduciendo la probabilidad de lesiones o enfermedades ocupacionales. A continuación, se describirán los tipos comunes de EPP y sus aplicaciones técnicas.
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Protección para la cabeza: Cascos de seguridad para protección contra impactos, caída de objetos y riesgos eléctricos. Comúnmente usados en construcción, minería y otros entornos industriales.
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Protección ocular y facial: Gafas de seguridad para proteger los ojos contra polvo, partículas y chispas. También se utilizan pantallas faciales que cubren la cara completa protegiendo contra salpicaduras químicas, chispas o cualquier cuerpo extraño que afecte la integridad del trabajador.
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Protección auditiva: Tapones auditivos para reducir el nivel de ruido y prevenir daños en el oído interno. Por otra parte, se podrían hacer uso de orejeras que cubren completamente las orejas y proporcionan una mayor reducción del ruido.
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Protección respiratoria: Mascarillas que Filtran partículas, polvo y algunos microorganismos del aire.
También se hace uso de respiradores que proporcionan aire limpio desde una fuente externa o filtran contaminantes específicos, como gases o vapores. -
Protección para las manos: Guantes de seguridad que dependiendo del material, pueden proteger contra cortes, abrasiones, productos químicos, calor, frío y riesgos eléctricos.
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Protección para los pies: Zapatos o botas de seguridad con punta de acero o materiales compuestos para proteger contra impactos, perforaciones, productos químicos y riesgos eléctricos.
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Protección corporal: Ropa de trabajo especializada, que debe ser resistente a productos químicos, llamas, arcos eléctricos, entre otros.
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Protección contra caídas: Arneses y líneas de vida que son esenciales para trabajos en altura, proporcionando seguridad al trabajador en caso de caídas.
Equipos de protección personal especiales
Los Equipos de Protección Personal (EPP) se dividen en categorías generales, que son las más comunes y ampliamente usadas, y especiales, diseñadas para riesgos y situaciones específicas que no se abordan con los EPP convencionales. A continuación, se detallan algunos de ellos.
Trajes herméticos: Estos son trajes completamente sellados que se utilizan en ambientes donde hay sustancias tóxicas. Son comunes en industrias químicas o en lugares donde se manejan materiales peligrosos. Estos trajes evitan que cualquier agente tóxico entre en contacto con la piel del trabajador.
Trajes aluminizados: Son trajes reflectantes que protegen al usuario de altas temperaturas y llamas. Se usan en la industria metalúrgica, en bomberos que combaten incendios industriales, o en situaciones donde hay riesgo de chispas y llamas.
Equipos de respiración autónoma (ERA): Proporcionan al trabajador un suministro de aire limpio proveniente de un tanque. Son esenciales en entornos donde el aire es irrespirable debido a la presencia de gases tóxicos o en espacios confinados.
EPP para espacios confinados: Además de los ERA, pueden incluir monitores de atmósfera para detectar gases peligrosos, sistemas de comunicación especializados y dispositivos de extracción para evacuar rápidamente al trabajador en caso de emergencia.
Ropa antiestática: Diseñada para evitar la generación de chispas en ambientes donde hay gases o vapores inflamables.
Equipos de inmersión o trajes secos: Usados en trabajos submarinos o en ambientes muy húmedos para proteger al trabajador de la hipotermia y mantenerlo seco.
Trajes de protección contra radiación: Estos trajes protegen al trabajador de la radiación ionizante. Son esenciales en industrias nucleares o en hospitales donde se manejan equipos radiológicos.
EPP para trabajos en tension eléctrica: En este caso se hace uso de guantes dieléctricos, trajes y herramientas aislantes, los cuales están destinados a proteger al trabajador de descargas eléctricas.
Normas relacionadas al uso de EPP
Las normas sobre el uso de equipos de protección personal (EPP) varían según el país y la región. Sin embargo, a nivel internacional, hay algunas organizaciones que establecen directrices en esta materia. A continuación, se mencionan algunas normas comúnmente reconocidas.
Norma ISO 45001:2018 - Sistemas de gestión de la seguridad y salud en el trabajo
La norma ISO 45001 proporciona un marco para establecer, implementar, mantener y mejorar un sistema de gestión de seguridad y salud en el trabajo. Aunque no se centra exclusivamente en EPP, sí establece directrices sobre la identificación de peligros, la evaluación de riesgos y la determinación de controles necesarios, entre los que se incluye el uso adecuado de EPP.
Normas EN (Europeas) relacionadas con EPP
Estas normas, desarrolladas por el Comité Europeo de Normalización, especifican requisitos para diferentes tipos de EPP. Por ejemplo, la norma DIN EN 166 se refiere a protectores oculares, mientras que la DIN EN 388 trata sobre guantes de protección contra riesgos mecánicos.
Normas ANSI/ISEA (EE. UU.) relacionadas con EPP
El Instituto Nacional Estadounidense de Estándares (ANSI) y la Asociación Internacional de Equipos de Seguridad (ISEA) desarrollan normas para diversos EPP. Por ejemplo, la norma ANSI/ISEA Z87.1 se refiere a la protección ocular y facial, y la norma ANSI/ISEA 107 trata sobre vestimenta de alta visibilidad.
Regulaciones OSHA (EE. UU.) relacionadas con EPP
La Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA) tiene varias regulaciones que establecen requisitos para la selección, uso y mantenimiento de EPP en diversos sectores industriales. Por ejemplo, la normativa 29 CFR 1910 Subparte I trata sobre EPP en general.
Aspectos clave a considerar al momento de seleccionar y utilizar EPP
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Evaluación de riesgos: Antes de seleccionar cualquier EPP, es esencial evaluar y entender los riesgos presentes en el lugar de trabajo. Esta evaluación determinará qué tipo de EPP es necesario.
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Formación y capacitación: Es crucial que los trabajadores sean capacitados en el uso, mantenimiento y limitaciones de los EPP que se les proporcionen.
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Ajuste adecuado: El EPP debe ajustarse correctamente al trabajador. Un mal ajuste puede hacer que el equipo sea menos efectivo y poner en riesgo al trabajador.
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Mantenimiento y reemplazo: Los EPP deben ser inspeccionados regularmente y mantenerse en buenas condiciones. Si se detectan defectos o desgaste, el equipo debe ser reemplazado.
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Limitaciones del EPP: Es importante entender que los EPP tienen limitaciones y que no eliminan el peligro. Su propósito es reducir la exposición o el potencial de lesión en caso de contacto con un peligro.
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Conciencia de los trabajadores: Los trabajadores deben ser conscientes de la importancia de utilizar EPP correctamente en todo momento y de reportar cualquier defecto o problema.
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Normativas y regulaciones: Es importante estar al tanto de las regulaciones locales y nacionales sobre EPP para garantizar el cumplimiento.
Los Equipos de Protección Personal son fundamentales en cualquier entorno laboral para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores. Su selección y uso adecuado, acorde a los riesgos específicos de cada actividad, es esencial para prevenir accidentes y lesiones.
Para asegurar su efectividad, existen normas y regulaciones a nivel internacional y nacional que establecen criterios de calidad y uso correcto. Cumplir con estas normativas no solo garantiza la protección de los trabajadores sino también la conformidad legal y operacional de las empresas.